En muchas ocasiones estamos tan ocupados que, la limpieza de nuestro baño se vuelve un verdadero problema; incluso llegamos a pensar que es aburrido, desesperante, asqueroso, en fin. La verdad es que, si te tomas el tiempo para pensarlo, no es tan complicado o no debería ser tan complicado como lo queremos ver.
En general, nos deberíamos estar tardando aproximadamente unos diez minutos en realizar la labor de la limpieza. Pero para hacer nuestra esa realidad, simplemente debemos seguir los pasos necesarios que nos estarán ayudando en la eliminación o prevención de los posibles gérmenes que, principalmente suelen provenir del sucio del inodoro.
Si nos quedamos periódicamente al pendiente del mantenimiento del baño, nos estaremos ahorrando las preocupaciones por la existencia de estos gérmenes. Pero entonces ¿Cómo mantener el baño impecable?
Existen dos maneras eficaces, la primera es utilizando los típicos productos comerciales. Ten siempre mucho cuidado con estos productos; lee bien la parte de atrás de cada producto y protege siempre tus manos con unos guantes de goma.
- En primera instancia, prepara el inodoro y limpia las manchas, vertiéndole el producto por todos los alrededores. Si llegase a encontrar cal, necesario elegir el producto que más se adecúe a ello.
En fontaneros zona Carabanchel te aconsejamos dejar reposar como por una media hora, luego terminar el proceso con ayuda de un cepillo de dientes para llegar a todos aquellos pequeños rincones. Intenta dar una restregada más y luego baja la palanca asegurándote de que toda la espuma se marche.
- El segundo método se trata del uso de la mezcla natural entre el bicarbonato de sodio, el vinagre y el agua. Este método llega a ser muy eficaz a la hora de la eliminación de esas manchas que se quedan difíciles de retirar.
Todo el proceso deberás realizarlo directamente en el inodoro. Agregas primeramente una taza de vinagre y comienzas a expandirlo con la ayuda de un cepillo de dientes.
Luego agrega una taza de bicarbonato de sodio para posteriormente agregar dos tazas de vinagre que hagan efervescencia y frotar por todos los rincones con la ayuda del cepillo de dientes. Una vez realizado lo anterior solo quedará bajar la palanca y habas culminado.